Un chatbot es una tecnología que ayuda a los usuarios establecer conversaciones con un programa informático. Habitualmente se encuentra dentro de un app de mensajería, como por ejemplo Facebook Messenger o Telegram.
Algunos ejemplos pueden ser:
Allset: podemos reservar mesa en un restaurante.
Fynd: busca productos entre varios comercios electrónicos de moda en el Messenger.
Como podemos observar, estas herramientas reconocen nuestro lenguaje natural y realiza las peticiones que les encargamos. Gracias a la Inteligencia Artificial, este programa aprende gustos y hábitos, lo cual hace que con el tiempo responda eficazmente a nuestras consultas.
Ahora vamos a analizar las ventajas de los chatbots
- Son inmediatos.
- En una app podemos ver todos los productos de esa app o incluso de muchas apps.
- Es auténtico ya que nos comunicamos con el lenguaje.
- Accesibilidad, con una interfaz intuitiva.
- Eficacia. Los usuarios consiguen lo que quieren en menos tiempo.
En 2016 se duplicó el uso de asistentes conversacionales (voz o texto).
El uso de este tipo de mensajería crece más deprisa que las redes sociales. La gente prefiere las conversaciones con menos interfaces. El 20% de las búsquedas se realizan por voz.
Dentro de unos años, veremos cómo las aplicaciones no tendrán menú ni muchas pantallas, ya que la integración de este software de reconocimiento natural se incrementará hasta llegar a eliminarlas.
Si queremos crear un chatbots debemos tener en cuenta que las preguntas no deben ser abiertas para que el usuario no pierda el hilo y despiste al bot. No hay que olvidar el contenido. Sin contenido no tendría sentido el chatbot, por eso, hay que gestionar adecuadamente el contenido que vamos a ofrecer.
Para lograrlo, desarrollaremos una clasificación del contenido, con relaciones semánticas, una conexión brutal entre todo el contenido, juegos de vocabularios y predicciones. Todo esto lo lograremos mediante prueba y error, para que podamos crear un chatbot cada vez más afinado.
